Orquesta de cámara de Las Tunas

Hace solo dos años que se creó, y la Orquesta de cámara de Las Tunas ya muestra una calidad reconocida, y un público seguidor.

Aun cuando en una manifestación como esta dos años es prácticamente el inicio, la agrupación ya traspasa las fronteras de Las Tunas, y acaba de presentarse en la iglesia de Paula de La Habana, invitada al onceno Festival Nacional de Música de Cámara.

No importa que sean estudiantes de nivel medio junto a sus profesores, los que integren la Orquesta ni la poca experiencia en tan difícil empresa. Bastan los conocimientos y la voluntad de hacer para empinar el camino y poner en alto el nombre de la Escuela Vocacional de Arte El Cucalambé, y codearse en el Festival, con artistas de la talla de la reconocida guitarrista tunera Rosa Matos, la violista Anolan González y el prestigioso coro Entre Voces, dirigido por Digna Guerra, Premio Nacional de Música.

Seguidores de las más bellas tradiciones de este tipo de música, los integrantes de la Orquesta de Cámara de Las Tunas interpreta bellas y complejas obras de Jean Sibelius y Roberto Valera, bajo la dirección del maestro Giudel Gómez González.

Ya los jóvenes artistas demuestran que no solo tienen vocación sino talento, y llevan sobre sí la música culta de la milenaria Europa, o de los clásicos cubanios.

Con la creación de esta orquesta de guitarras Las Tunas da sus primeros pasos hacia la conformación de una orquesta sinfónica, un sueño de muchos, caro por demás, pero probable, porque la base ya está asegurada y de qué manera, pues el ímpetu de años y la excelente formación profesional son avales indiscutibles.

Ahora, después del festival, los motivos y las metas son mayores, porque el incentivo de haber estado cerca del maestro Frank Fernández, de debutar en la capital, delante de especialistas y un público conocedor, hacen de la Orquesta de cámara de Las Tunas el blasón que inicia el camino hacia la sinfónica, porque siempre se puede si el talento está ahí, fomentándose, en pleno desarrollo.