Nuevamente Guillermo Vidal dicta lo que es bueno en la creación literaria con la premiación del Concurso nacional de narrativa que lleva su nombre, y que cada año es abierto a todos los escritores del país desde Las Tunas, ciudad del oriente cubano que lo vio nacer hace 62 años y fue testigo de su muerte el 15 de mayo de 2004.
Este año, en su octava edición, el concurso es ganado por otro escritor fuera de Las Tunas, y en esta ocasión el lauro lo alcanzó el narrador de la provincia de Mayabeque Reinaldo Medina Hernández, con su texto de cuentos Aguas albañales.